domingo, 7 de mayo de 2017

A la madre de Dios




No existen palabras para ensalzar a la madre

que es todo para sus hijos

a veces sacrificándose; siempre pendiente de ellos…

Así es ella, así es la madre.

En su vientre nueve meses lleva a su hijo la madre

y al nacer ¡cuánta alegría!

Todo es gloría, todo paz

el contemplar a su hijo

que ya llegara a este mundo

para su felicidad.

Le cuida con gran esmero,

le contempla todo el día,

es el hijo de su amor por el cual daría su vida

y meciéndole en la cuna le canta y hasta se queda dormida…

Más el tiempo va deprisa

ya creciera, le llegó la pubertad

y la convivencia es dura…

dentro de su dulce hogar

donde jugaba y reía hoy no hay tranquilidad.

El hijo desobediente; a veces, insoportable

la madre todo tolera… por eso, porque es la madre.

Mas al correr de los años

se puso a formar pareja

y de casa se ausentó

sin recordar a su madre

que ha sido quien lo parió.

¡Cuánto le quiere la madre!

de su lado ya se fue; ella siempre preocupada

¿le irá mal o le irá bien?

y recordando a su hijo ha llegado la vejez.

llora en silencio la madre

¡tantas veces sola está!

apenas si se la escucha, ni cariño se la da.

Hasta el día de su muerte a su hijo queriendo está,

mas a éste apenas le importa,

le estorba… y así sortea a la madre

que con pena, de hogar en hogar la llevan…

Madre hermosa, madre buena

que en tu vida seas feliz

y que tus hijos te quieran.

MARÍA PRIETO

3 comentarios:

  1. Maravilloso poema materno escrito con gran sensibilidad.

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  2. Que excelente y triste poema. Me ha hecho llorar, que sirva como denuncia a ciertos hijos que no le hagan eso a su madre jamás. Una madre es grande siempre, de joven y de mayor, la mía me cuida, jamás estorba porque es mi mejor amiga y lo será siempre. Te hago RT por twitter, María. Felicidades por tu poema.

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    1. Una madre es el mayor tesoro que tenemos en este mundo. Hay que cuidarla y amarla, pues se lo merece, igual que ella lo hizo por nosotros y seguirá haciéndolo, ya que el día en que nacimos se formó un mágico vínculo que nos unirá de por vida.
      Un saludo y gracias por tu comentario, Mariola.

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