¿Quién prostituye a quién? Esa es la pregunta que me
ronda en la cabeza. Casi todo parece evidente, excepto esa incógnita difícil de
despejar. Las prostitutas trabajan para los vampiros y los vampiros, para las
prostitutas. Los vampiros usan a las mujeres para captar a sus presas y las
prostitutas reciben dinero por el sexo.
El banco de sangre, siempre repleto de faldas cortas
y abrigos de piel. Entran con algún doctor y salen después con neveras
portátiles. El corazón me palpita fuerte. El clientelismo con los vampiros ha
ido demasiado lejos. Han estado traficando con la sangre de los humanos.
Tengo que despejar esa maldita incógnita ya. No me
deja dormir por las noches. El vampirismo está alcanzando a las estructuras de
la política.
ÓSCAR ALONSO
TENORIO
El hombre se prostituye solo, con las decisiones que toma. Cuando digo hombre incluyó a la mujer.
ResponderEliminarHola, Leah. Cuánta razón tienes. Por desgracia, el ser humano aprende con mayor facilidad lo malo que lo bueno. Es más fácil destruir que construir y no nos damos cuenta de que estamos autodestruyéndonos con nuestros propios actos.
EliminarUn saludo, Leah, y gracias po tu comentario.