Como
un dulce olor a canela y naranjas suspendido vagamente en el aire; una
presencia que no puedes advertir a menos que prestes atención y que sin embargo
te impregna, te acompaña cada segundo, acaba por modificar los otros olores que
percibes. De tal forma llegó a mi vida, y ni tan siquiera era consciente de
respirar en aquellos días.
Recuerdo
retazos de sonrisa blanca; una mirada casi infantil color hojas de otoño; unas
manos grandes y ásperas, hechas para ayudar a la tierra a parir sus frutos o
para trabajar caricias nuevas en una piel infértil de desengaño. Si cierro los
ojos y me deshago del tiempo, su recuerdo aún alisa mi frente en señal de
inocencia renacida, aún frunce mis labios formando un panal de besos al aire.
Si cierro los ojos y me deshago de las trabas del llanto, retornan nítidas sus
palabras sin voz, los susurros compartidos a la vera del deseo, las risas mudas
que formaban algarabía en los cuerpos satisfechos.
Perfumó
mi vida como se perfuma la atmósfera en primavera, disfrutando a su lado de un
imprevisto picnic en los bosques antesala de la felicidad. De nuevo pude
experimentar rubores olvidados que la sangre viva coloreaba en mi tez, del
efecto de secretos bálsamos para un alma dolida, de la renacida opulencia en los
latidos de un corazón que padecía de sequía emocional.
Le
debía tanto y me hizo tanto bien, que cuando estuve restablecida y llegó el
momento, ni siquiera pude decirle adiós. Confío en que lo comprendiera y en que
me olvidara como se olvidan las estaciones pasadas. De otro modo no le dejé en
prenda más que mi propio dolor y un regusto de almendras amargas.
P.D.: El envase de mi nuevo
ambientador para el salón prometía “un viaje sensorial”, pero nunca pensé que
tuviera la facultad de hacerme recordar con nitidez cosas que nunca han
sucedido…
Entre lo cómico y la amistad. Dos sentimientos diferentes, a veces paralelos, que ha sabido conjugar perfectamente Julia C. Cambil.
ResponderEliminar¡Bravo escritora!
Muchas gracias por tus generosas palabras, Luis. Me alegro de que te haya gustado el "relato senso-publicitario" je, je.
ResponderEliminarAhora que me releo en este texto que escribí hace tiempo, yo misma me sorpendo como nueva, con un estilo diferente al que tengo ahora. Me encanta la experiencia y debo abradecértela a tí en esta ocasión :)
Un fuerte abrazo, muy amable al publicarme en tu blog!!
No te equivoques, Julia C., soy yo quien tiene que agradecerte a ti la colaboración en club del novelista, un espacio que es no sólo mío también tuyo y de los demás amantes de la literatura.
EliminarUn fuerte abrazo, escritora.
Excelente trabajo de nuestra compañera Julia. Ya tenía referentes de ella en otras páginas. Fantástica escritora. Un saludo.
ResponderEliminarCoincido contigo, Antonio, en tu acertada apreciación. Julia tiene un talento innato para las letras y nos deleita siempre con su capacidad de expresión.
EliminarUn saludo y gracias por tu comentario.
Muchísimas gracias a los dos por vuestras palabras, sois más que generosos conmigo!! Me alegro de que os haya gustado el texto, es para mi una gran satisfacción.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo a ambos, espero que estéis teniendo una verano genial :)
Un enorme abrazo también para ti, Julia. Personas como tú hacéis posible club del novelista y por eso es un poco vuestro.
Eliminar¡Un saludo!