Entretejiendo mi camino en la mañana,
aún de noche, entre la niebla.
Son esos ecos que retumban al pasar las sendas
de los sauces.
Paseos entre las nubes tan bajas que
me abrazan.
Es la caricia de llovizna con
microgotas en mi rostro,
las que me despiertan al día.
Silabea el viento mientras besa mis
cabellos.
Me envuelvo en tu abrazo.
Me escondo de la mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario